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«La comunidad internacional no olvidará» que la orden para el «ataque terrorista» contra el secretario general del movimiento chiita Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrallah, se emitió desde Nueva York, valoró este sábado el presidente de Irán, Masud Pezeshkian. En su opinión, «EE.UU. no puede desligarse de su complicidad con los sionistas» en este asesinato.

Además, el mandatario iraní sostuvo que la muerte de Nasrallah «fortalecerá aún más el árbol de la resistencia». Pezeshkian calificó al difunto líder libanés de un «orgullo de los musulmanes» y aseveró que, finalmente, logró «su anhelado deseo, es decir, alcanzar el más alto nivel de martirio».

«El camino divino nunca quedará sin un comandante y un líder», expresó Pezeshkian sobre que un nuevo liderazgo del movimiento chiita.

El presidente de Irán expresó sus condolencias por la muerte de Nasrallah tanto al líder supremo de la República Islámica, el ayatolá Alí Jameneí, como «a todos los pueblos libres y oprimidos del mundo».

La agencia de noticias Mehr comunicó anteriormente este sábado que el general de brigada Abbas Nilforooshan, subjefe de operaciones de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, también murió el viernes en el ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa de Israel contra el sur de Beirut.

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