El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha ofrecido este viernes un discurso en la sesión plenaria del XXVII Foro Económico Internacional (SPIEF-2024), uno de los eventos empresariales más grandes del mundo que arrancó el 5 de junio en la ciudad rusa de San Petersburgo.
Putin inició su discurso centrándose en la soberanía y el estado de las relaciones comerciales en el mundo, destacando cómo Rusia viene adaptándose a las sanciones. «A pesar de todos los obstáculos y sanciones ilegítimas, Rusia sigue siendo un actor clave en el comercio mundial», afirmó.
El mandatario detalló que el volumen del intercambio comercial con Asia creció un 60 % y con América Latina, un 42 %, al tiempo que agregó que se prevé que el volumen de tráfico de mercancías a través de Rusia se multiplique por 1,5 de aquí a 2030.
También destacó que la tasa de crecimiento económico de Rusia es superior a la media mundial y que este crecimiento está impulsado principalmente por industrias no relacionadas con los recursos, precisando que el PIB ruso creció un 3,6 % el año pasado y un 5,4 % en el primer trimestre de 2024.
Además, recordó que, de acuerdo con las últimas estimaciones del Banco Mundial, Rusia ya es la cuarta economía más grande del mundo en términos de PIB y por paridad de poder adquisitivo, superando a Japón.
«Rusia demostró un alto nivel de preparación y receptividad a la transformación tecnológica. Vemos cómo ya cambiaron nuestro sector financiero, el comercio electrónico, los servicios de transporte y la administración pública», dijo, añadiendo que «procesos similares están empezando a desarrollarse en las Fuerzas Armadas, donde también se requiere un alto ritmo de renovación tecnológica».