Gamaliel Vázquez
La situación de desastre originada por terremotos al sur y centro de México, ha generado una entramada de cuestionamientos entre los potosinos que sostienen la versión de que el puente ubicado en Avenida Universidad podría colapsar en su totalidad de presentarse algún movimiento tectónico extraordinario en el Estado de San Luis Potosí, tal como ha sucedido en gran parte del país recientemente.
El temor de los ciudadanos en que la construcción se venga abajo radica en la razón de que el citado puente fuera construido en los años 60’s y que en la actualidad y después de 50 años no haya recibido rehabilitación significativa que garantice estabilidad en su estructura para que dé soporte a cualquier contingencia que pudiera presentarse como tal.
Habrá de que recordarse que la cimentación del puente de Universidad se encuentra por encima del patio que centraliza el paso de las vías ferroviarias en la ciudad, y cuyo tramo es una de las principales conexiones hacia el primer cuadro de la ciudad y su vez la salida del Centro Histórico hacia el distribuidor Juárez.
La constante vibración generada por el gran pesaje de las locomotoras que ruedan por debajo del puente ha sido la causa de diversas fracturas en la estructura observadas a simple vista en la cima, que sumadas al tonelaje que soportas el paso de los camiones urbanos que transitan diariamente y a toda hora por esa pasadera, restan firmeza a la infraestructura.
Apenas el año pasado, la directora de Obras Públicas en la administración de la capital potosina, Leticia Vargas Tinajero, señaló que al haberse efectuado la rehabilitación de la Avenida Universidad, se percataron de las debilidades que el puente presentaba, siendo así que se emprendió la iniciativa para un proyecto de reparación a la plataforma, sin embargo no se ha concretado ni iniciado ningún trabajo para dicho fin.
Sobre la carpeta de rodamiento del puente, justo en la cima, existen agrietamientos que van de lado a lado, mismos que han sido únicamente cubiertos por una mezcla de chapopote y grava que sirven únicamente para cuestiones de estética, pero no para darle firmeza.
Han surgido experiencias ajenas en demarcaciones afectadas por sismos que obligan a voltear a ver las debilidades en las estructuras y edificaciones en esta ciudad, ya que las principales causas de derrumbe fueron por la debilidad de los inmuebles y la pasividad de las autoridades en las exigencias para el cumplimiento de las normativas en materia de Protección Civil.
De presentarse una catástrofe y que el puente de Universidad sea una de las estructuras colapsadas, según la opinión ciudadana, no habría otra responsabilidad más que en las autoridades estatales y municipales por no haber empleado planificación alguna para la prevención.