Desde hace mucho, las cirugías estéticas se han vuelto populares y una de éstas es la liposucción, intervención que tiene como propósito el remodelado de la silueta a través de la extracción de grasa. Sin embargo, hay algunos casos que no han salido bien debido a que existen médicos no certificados que actúan sin ética.
Uno de estos casos fue el de Lilian Carolina Gastélum Flores, una mujer de 36 años y madre de tres niños que decidió someterse a dicha cirugía sin saber que perdería la vida. De acuerdo con la familia, la cirugía presentó irregularidades por lo que procedieron de manera legal en contra del médico que la atendió: Alexander Leroy.
Los hechos ocurrieron a las 10 de la mañana en la clínica Beauty Diagnosis de la calle Leona Vicario de Zona Río en Tijuana, Baja California. No obstante, para las 15:00 horas sus familiares fueron avisados del deceso de la joven. Cabe destacar que Lilian Carolina gozaba de buena salud, misma que los estudios médicos avalaron, de acuerdo con su hermana Karen.
«La Fiscalía general del estado lamenta el fallecimiento de esta mujer y trabaja en la integración de la investigación correspondiente para determinar las causas de muerte, así como la responsabilidad de quien o quienes arroje la indagatoria», mencionó la dependencia a través de un comunicado.
¿Cómo sucedieron los hechos?
La familia de Lilian Carolina Gastélum Flores narró que la cita de la joven fue a las 6 de la mañana donde cuatro horas más tarde ingresó al quirófano para comenzar con el procedimiento; de manera constante salía parte del personal para darles parte de su estado; sin embargo, la operación se prolongó y ellos ya no estuvieron tan confiados.
Fue hasta pasadas las 15 horas cuando les informaron que la joven madre no había resistido la operación y a consecuencia falleció. Como era de esperarse la reacción no fue nada buena y de inmediato le exigieron a las autoridades que pusieran cartas en el asunto para que se haga justicia. Por su parte, el Servicio Médico Forense indicó que la causa de la muerte fue por «embolia grasa».
Vía: El Heraldo de México.
